lunes, 4 de abril de 2016

Con-ciencia

Nos maravillamos ante la grandeza del ser vivo más pequeño que es la célula, y tenemos mil preguntas: ¿Qué pasa si se rompe una célula? ¿Somos células desde que somos concebidos? ¿Enferman menos las células vegetales porque se contagian menos al tener pared celular? ¿Y si comemos sólo carne se enferman las células? ¿Por qué no se regenera un brazo con las células como la cola de las lagartijas? Y nos hacemos conscientes de la maravilla que es vida y de lo mucho que tenemos que ver tratando bien mediante buenos hábitos a nuestras células.

Empezar a hablar de vida nos acarrea mil curiosidades, las buscamos y lo que ocurre es que nos lleva a más cosas que querríamos saber. Hacemos algunos experimentos con plantas para llegar a conclusiones sobre la importancia del sol, del agua, del alimento, lo extrapolamos a la nutrición de nuestro propio cuerpo; comprobamos la capacidad de adaptación que cualquier individuo ha desarrollado para adaptarse al medio; vemos vídeos, analizamos fotos, dibujamos y hacemos esquemas para comprender mejor. Pero el diálogo abierto, el intercambio de opiniones, poner en común nuestros descubrimientos fruto de nuestras investigaciones es nuestra baza más fuerte. A la mañana siguiente todos tenemos una historia que contar, algo que hemos escuchado en casa, o que le pasó a un conocido, o que hemos escuchado en la tele; y así relacionamos, "enganchamos" con la realidad lo que hemos aprendido. ¡Es tan útil conocer!

Algunos ya lo tienen muy claro: quieren ser científicos y algunas disquisiciones nos llevan por caminos tortuosos... ¿Y si un científico juntara células de un animal y una persona? Y entonces les digo lo peligroso que podría ser, pero sobre todo, hago referencia a la ética y buscamos ejemplos. La ética, una nueva disciplina de la que no habíamos oído hablar.

Mil preguntas...

Y mientras investigábamos sobre las plantas, nos hemos encontrado con que hay árboles en nuestra Extremadura que son llamados singulares por su magnificencia o por su edad. Cada uno ha elegido uno y hemos hecho una pequeña presentación con ellos que ahora os dejamos aquí, por si algún día, en alguna excursión familiar os apetece ir a admirarlos.

2 comentarios:

  1. Que bien, quizá aquí tenemos un árbol singular que podíais investigar:
    el nogal de la canal....

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  2. Buena propuesta, Jose. Tomamos nota!

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